Pedaleando la Vida






En el amanecer, cuando el sol asoma,  
la bicicleta espera, lista para rodar;  
con cada pedaleada, el alma se desploma,  
por senderos de sueños que invitan a volar.

El viento acaricia mi rostro sonriente,  
las ruedas girando marcan el compás;  
cada kilómetro recorrido es un canto valiente,  
libertad en dos ruedas, un viaje sin más.

Las montañas y valles son mi escenario,  
los árboles susurran secretos al pasar;  
en cada ruta hallo un nuevo relicario,  
de risas y aventuras que invitan a soñar.

Los amigos me acompañan en esta jornada,  
las risas resuenan como música al andar;  
en el camino compartimos la mirada,  
y juntos pedaleamos hacia el horizonte a brillar.

No hay prisa en el viaje, solo el ritmo del viento,  
cada giro es una danza, cada alto un respiro;  
la bicicleta es mi aliada en este momento,  
pintando paisajes de amor y deliro.

Así que siempre pedaleemos con alegría,  
explorando caminos que nos lleven a ser;  
la vida es un viaje lleno de energía,  
y en cada pedalada hay un nuevo amanecer.


Dra. Alice Arce Aguilera

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