Gratitud en cada latido
En el amanecer de un nuevo día,
mi corazón se llena de alegría,
por el don de la vida, tan puro y sincero,
un regalo divino, un amor verdadero.
Agradezco a Dios por cada respiro,
por la luz que ilumina mi camino,
por la salud que abraza mi ser,
y por las fuerzas que me hacen renacer.
Momentos compartidos, risas y abrazos,
en el cálido hogar, donde hallo mis lazos.
La familia es tesoro que nunca se apaga,
un refugio constante donde el amor se embriaga.
Por cada pequeña cosa que a menudo olvido,
por las flores que crecen, por el cielo querido.
Por los días soleados y las noches estrelladas,
por las lecciones aprendidas en jornadas doradas.
Gratitud por los sueños que aún están por venir,
por las oportunidades que me hacen sentir.
Por los amigos leales que caminan a mi lado,
en este viaje hermoso, nunca desamparado.
Gracias por las pruebas que forjan mi alma,
que enseñan a luchar y a encontrar la calma.
Cada desafío es un paso hacia el crecimiento,
una oportunidad para el agradecimiento.
Así elevo mi voz en sincera canción,
celebrando la vida con todo mi corazón.
Que la gratitud sea mi luz y guía,
en cada latido y en cada melodía.
Dra. Alice Arce Aguilera
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