A Mi Amor del Verano Pasado

En las cálidas brisas de aquel verano dorado,  

te encontré, amor mío, en un instante soñado.  

Eras el sol brillante, la risa en el aire,  

un susurro de magia que nunca se apague.

Bailamos entre olas, con los pies descalzos,  

las horas se deslizaban como suaves abrazos.  

Tus ojos eran estrellas en la noche estrellada,  

y en cada promesa, el tiempo se paraba.

Recuerdo el aroma a sal y a libertad,  

los secretos compartidos en la oscuridad.  

Las risas resonando en las olas del mar,  

tus labios rozando los míos, un dulce despertar.

Los días se alargaban como sueños sin fin,  

cada momento contigo era un nuevo festín.  

El sol se ponía y pintaba el cielo en llamas,  

mientras nuestras almas danzaban sin dramas.

Pero el verano se fue como un suspiro ligero,  

dejando solo ecos de un amor sincero.  

Aunque la brisa cambió y las hojas cayeron,  

en mi corazón guardo los instantes que fueron.

A ti, amor del verano que marcaste mi andar,  

te llevo conmigo en cada lugar.  

Eres la canción que aún resuena en mi ser,  

un dulce recuerdo que nunca olvidaré.

Así celebro lo vivido con nostalgia y cariño,  

pues aunque el tiempo pase y nos lleve el destino,  

siempre serás parte de mi historia encantada,  

mi amor del verano, mi amada soñada.

Dra. Alice Arce Aguilera