A mi amada hermana Magali Arce
A mi amada hermana Magali Arce
En la tormenta oscura de la vida,
donde el dolor a veces se asoma,
te levantas, Magali, con fuerza encendida,
como el ave fénix que renace en su aroma.
Tu corazón ha sentido el peso del miedo,
pero en tu interior late un espíritu valiente.
Cada lágrima caída es un paso en el sendero,
hacia la luz que te espera, brillante y presente.
Eres un roble que desafía la tempestad,
con raíces profundas que aferran al suelo.
Tu resiliencia florece en la adversidad,
y en cada cicatriz hay un nuevo anhelo.
El camino del cambio puede ser incierto,
pero tú avanzas con paso decidido.
La vida te ofrece un futuro abierto,
donde el amor propio será tu abrigo.
Magali, hermana, eres fuerza y coraje,
una guerrera que lucha por su verdad.
Tu historia de vida es un poderoso mensaje:
la libertad es tu derecho y tu dignidad también lo es.
Así que sigue adelante con fe renovada,
cada día es una página en blanco por escribir.
Tu historia no termina; es solo una jornada,
y en cada paso firme, aprenderás a vivir.
Dra. Alice Arce Aguilera.

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